“Equipos de fútbol maquillan balances.” El periodista Jaime Viana Rojas – Redactor de Economía y Negocios (Portafolio.com) dice textualmente: “Un informe de la Superintendencia de Sociedades halló un sinnúmero de inconsistencias en la contabilidad de la mayoría de los equipos. La mayoría de los equipos profesionales del fútbol colombiano no tienen criterios contables unificados, y por el contrario, su información financiera presenta inconsistencias…”
Esto seguramente le pasa no solo a los Clubes de Fútbol colombiano si no también a otros clubes de fútbol así como a empresas pequeñas, medianas y grandes en el mundo.
Las primeras civilizaciones que surgieron sobre la tierra tuvieron que hallar la manera de dejar constancia de determinados hechos con proyección aritmética, que se producían con demasiada frecuencia y eran demasiado complejos como para poder ser conservados por la memoria. Reyes y sacerdotes necesitaban calcular la repartición de tributos y registrar su cobro por uno u otro medio. De aquí nace la necesidad de la CONTABILIDAD.
Para que?, para proporcionar una imagen numérica de lo que en realidad sucede en la vida y en la actividad de la empresa, proporciona una base en cifras para orientar las actuaciones de gerencia en su toma de decisiones y proporcionar la justificación de la correcta gestión de los recursos de la empresa.
Por esto, quiero referirme a los principios de contabilidad. Dados por las normas internacionales de contabilidad (NIC). Estos principios representan las presunciones BASICAS sobre las que descansan las normas con el objeto que los estados financieros puedan ser entendidos por terceros.
Los principios contables y no siempre aceptados son:
- Principio de prudencia. Únicamente se contabilizarán los beneficios realizados a la fecha de cierre del ejercicio. Por el contrario, los riesgos previsibles y las pérdidas eventuales con origen en el ejercicio o en otro anterior, deberán contabilizarse tan pronto como sean conocidas. El mas importante de todos y prima sobre los demás.
- Principio de empresa en funcionamiento. Salvo prueba de lo contrario, se presume, al aplicar los principios contables, que la empresa continúa su actividad. Por lo tanto, al determinar el valor del patrimonio empresarial no se considerará su valor liquidatorio.
- Principio del registro. Los hechos económicos deben registrarse cuando nazcan los derechos u obligaciones que los mismos originen.
- Principio del precio de adquisición. Los bienes y derechos se valorarán por su precio de adquisición si son adquiridos a terceros o por su costo de producción si los elabora la empresa con sus propios medios.
- Principio del devengo. La imputación de ingresos y gastos deberá hacerse en función de la corriente real de bienes y servicios que los mismos representan, con independencia del momento en el que se produzca la corriente financiera o monetaria de los mismos. Es decir, se contabilizarán los ingresos y gastos cuando se entreguen o reciban los bienes y servicios correspondientes. Otra cuestión distinta es que se hayan cobrado o pagado.
- Principio de correlación de ingresos y gastos. Establece que: Resultado ejercicio = Ingresos ejercicio – Gastos ejercicio
- Principio de no compensación. No podrán compensarse las partidas del activo y del pasivo del balance, ni tampoco las de gastos e ingresos de la cuenta de pérdidas y ganancias. Han de valorarse separadamente las distintas partidas del activo y del pasivo.
- Principio de uniformidad. Una vez adoptado un criterio en la aplicación de los principios contables, éste ha de mantenerse en el tiempo y en el espacio, salvo que se alteren los supuestos originarios, en cuyo caso deberán advertirse en la memoria las circunstancias que han producido tal modificación y su incidencia en las cuentas anuales.
- Principio de importancia relativa. Se admite la no aplicación de alguno de los principios citados, siempre y cuando su repercusión cuantitativa en las cuentas anuales sea escasamente significativa, no alterando la imagen fiel.
La contabilidad debe ser a su vez, objetiva, verificable, precisa, confiable, útil, productiva, pertinente, integra, suficiente, comparable, oportuna y clara entre otras.
Un mensaje final a los presidentes de los clubes de fútbol colombiano, mas que buscar la complejidad dedíquense a ser el mejor aplicando los conceptos básicos y si no pregúntele al presidente del Real Madrid, 28 Ligas, 9 Copas de Europa, 17 Copas del Rey, 2 Copas de la UEFA y 2 Copas Intercontinentales. Recientemente no han ganado ningún titulo, pero sus seguidores han aumentado sus utilidades en mas de 300 M de euros y con los mejores jugadores del mundo.